ÍNSULA 

UN PROYECTO DE NADIN OSPINA

A partir del viaje realizado a Inglaterra en el mes de Diciembre de 2008 por  invitación de la Colección de Arte Latinoamericano de la Universidad de Colchester  UECCLA para realizar un proyecto específico como encargo para la inauguración  de su nueva sede el Museo FIRSITE: NEWSITE y gracias al contacto directo con las  circunstancias culturales e históricas del lugar y al análisis del concepto curatorial  de la exposición “What Matters” surge el proyecto “Ínsulas”.  

El vocablo Ínsula proviene del latín Insulae y es una expresión del español arcaico  para el termino moderno Isla. Recuérdese el episodio de la Ínsula Barataria en el  Quijote de Cervantes. En la contemporaneidad el concepto Insularidad rebasa la acepción de  discontinuidad geográfico como condición propia de una isla para extenderse a la  descripción de diversos conceptos que partiendo de la metáfora geográfica tratan  de explicar o diagnosticar condiciones particulares de los individuos y las  sociedades.

El carácter simbólico del concepto insular a sido utilizado ampliamente para  definir circunstancias políticos, económicos e incluso psicológicos. El concepto Insularidad ha sido aplicado a fenómenos sociales de aislamiento,  discriminación, incomunicación o exclusión. 

La psiquiatría a echado mano del termino para nominar el síndrome de insularidad o espíritu Robinsoniano que describe el aislamiento y las condiciones de soledad  forzosa o autoimpuesta dentro de diversas patologías.

Como elemento estético, literario y poético la insularidad a sido motivo reiterado  en diversas obras universales y forma parte de muchas mitologías y narraciones  fantásticas.

Utopia Robert Owen (1838).

De la Atlántida y Utopia a Ávalon. De la Ínsula Barataria a la Isla de la fantasía. De  la Isla del Diablo a San Quintin De Robinson Crusoe al Señor de las moscas. De la  Ísla de los muertos de Arnold Boecklin a la Isla del Doctor Moreau.

La Ciudad Ideal. 1470 por Piero della Francesca

En la historia del arte la representación arquitectónica ha sido un motivo  recurrente, podemos encontrarla en las pequeñas figuras de arcilla egipcias que  representan casas y edificaciones a manera de miniaturas o juguetes, en las  representaciones cerámicas de la cultura Mochica del Perú precolombino, en la  gran pintura perspectivista del renacimiento, en la pintura veneciana del siglo  XVII, en los dibujos y grabados de ruinas de Piranesi, en las pintura de Turner,  Monet, Georgia O’Keeffe, John Marin, en las intervenciones de Gordon Matta-Clark,  las construcciones con fichas y cuero de los chinos Liu jianhua y Liu Wei o en las  obras políticas del ruso Constantin Boym , por citar solo algunos ejemplos.

Representación arquitectónica egipcia en cerámica
Vasija Cultura Mochica con representación arquitectónica.

Liu jianhua
Liu Wei
Modelo de ciudad realizado en azúcar

En la cultura popular el “Arte de Arquitectura”, la producción de ciudades en  miniatura o las construcciones arquitectónicas de arena, hielo, cubos de azúcar,  naipes, palillos, ladrillos lego, basura y todo tipo de refinadas artesanías rebela un  intenso deseo de representación y apropiación de la arquitectura universal.

Edificios con ladrillos lego
Modelos de colección para turistas

El coleccionismo de souvenirs arquitectónicos es un interesante aspecto de la cultura kitch que convierte al viajero en el buscador de esos trofeos de caza: las representación a pequeña escala del ícono. Una arquitectura portable, doméstica,  domeñada, coleccionable.  

En el caso particular del coleccionista de souvenirs arquitectónicos para quien la  experiencia del viaje es inasible o insuficiente, podemos descubrir un mecanismo  de compensación, una forma de hacerse a un universo simbólico que reemplaza al  real . 

Una clave del origen de esta compulsión puede estar en el dialogo de Kublay Kan y  Marco Polo que precede el capitulo II de Las Ciudades Invisibles de Italo Calvino. —¿Viajas para revivir tu pasado? —era en ese momento la pregunta del Kan, que  podía también formularse así: ¿Viajas para encontrar tu futuro? Y la respuesta de Marco: —El allá es un espejo en negativo. El viajero reconoce lo  poco que es suyo al descubrir lo mucho que no ha tenido y no tendrá. 

Ínsula. 2010. Bronce (Detalle)

INSULAS Y LA POPULARISACION MEDIÁTICA DE LA ARQUITECTURA

En un mundo mediatizado de información instantánea, de viajes virtuales y reales  los medios de comunicación, las industrias turística, editoriales y del 

entretenimiento hacen profusa difusión del patrimonio arquitectónico universal  generando un conocimiento y un interés generalizado por el pasado, el presente y  el futuro de las construcciones como símbolos de las civilizaciones, de su triunfo,  de su caída y su destrucción.  

los canales de televisión “científicos”, “culturales” e “históricos” han puesto de  moda la citación de la arquitectura desde diversos puntos de vista ya como  detallada reconstrucción de la historia, ya como despliegue de tecnología y  virtuosismo técnico y artístico; como dispositivos militares, religiosos o residencia  de monarcas, millonarios, famosos e infames de todos los tiempos, incluso en pro  del espectáculo y la audiencia masiva son el escenario de especulaciones y  fantasías como los elementos mágicos , místicos o alienígenas de su origen, diseño  y construcción o las presencias paranormales que los habitan.  

El futuro no está exento de este prurito arquitectónico. “Megaconstrucciones”,  construcciones en otros mundos, en el interior de la tierra o en el fondo del mar. 

La iconización de la arquitectura por medio del cine, la literatura y las artes plásticas es un fenómeno notable. El registro, la escenificación y la recreación de las grandes metrópolis y sus lugares  de culto son el telón de fondo de grandes y pequeñas producciones de todos los  tiempos así como la creación de fantasías arquitectónicas como “Metrópolis” (La  de Fritz Lang y “Metrópolis” la de Supermán, también del super héroe Kandor la  embotellada capital de la antigua Kripton, “Ciudad Gótica” de Batman, la ciudad de  las esmeraldas del mago de Oz, Zion de The Matrix, etc. Que han generado un  imaginario colectivo de fantasía y ensueño.

La visión apocalíptica de un cataclismo universal y la provable destrucción de la  civilización tal y como la conocemos es otro filon del tema arquitectonico muy  recurrente. Ciudades post-humansa debastadas, corroidas y retomadas por la  naturaleza implacable y vengativa, forman un cuadro de dramatismo y terror que  recuerda la fragilidad humana y la finitud de sus obras.  

Este escenario nos remite a una reflección sobre la capacidad de autodestrucción  de una sociedad que usa y desecha todos sus productos incluidos los culturales y  desde luego la arquítectura. 

Como acota Marshal Bergman citando a Marx:  

Todo lo que la burguesía construye es construido para ser destruido.  Los pueblos y las ciudades, las regiones y hasta las naciones que los albergan, todo  está hecho para ser destruido mañana, aplastado, desgarrado, pulverizado o  disuelto, para poder ser reciclado o reemplazado a la semana siguiente, para que  todo el proceso recomience una y otra vez, es de esperar que, para siempre, en formas  cada vez más rentables. El patetismo de todos los monumentos burgueses es que su  fuerza material y su solidez no significa nada en realidad, no soportan ningún peso  son batidos como débiles juncos por las mismas fuerzas del desarrollo capitalista que  exaltan. Hasta las construcciones burguesas mas hermosas e impresionantes, y las  obras públicas, son desechables, capitalizados para una rápida depreciación y  planificadas para quedar obsoletas.

INSULAS Y EL PESEBRE

La obra “Ínsulas” tiene un referente directo en el “Pesebre”, “Nacimiento” o  “Belén”. Construcción escenográfica de carácter religioso de gran arraigo en las  comunidades católicas del mundo.  

El pesebre es una escenificación tridimensional del nacimiento de Jesús que  convoca a los creyentes a la meditación el recogimiento y la adoración. 

En 1223 San Francisco de Asís montó un auto sacramental, versión medieval del  teatro clásico argumentado en pasajes de la Biblia, en una ermita de Greccio, Italia,  representando de forma real, con actores y animales verdaderos, la natividad. Está  función generó tanto fervor en la gente que la Iglesia lo aprobó y promovió su  difusión.  

En los períodos renacentista y barroco la decoración de los nacimientos cobró  fuerza y se volvió un arte. En América, los franciscanos usaron los belenes como  método de evangelización. Fue allí cuando comenzaron a ser incongruentes, ya que  incluían animales y plantas americanas, que en Palestina no existían en tiempos de  Jesús, como los guajolotes o el maíz.  

En los últimos años la oferta para coleccionistas de pequeñas maquetas de  monumentos, castillos, iglesias, puentes y demás eleméntos arquitectónicos característicos de cada región, amén de personajes históricos de diferentes etnias, convertidos en juguetes, incrementaron el inventario de objetos “apropiados” para  los pesebres, entremesclándose tiempos y lugares en un pastiche surrealista. Hoy se construyen pesebres mecánicos de gran elaboración y extención y se les ha  desplasado del ámbito estríctamente litúrgico para extenderse a espaciós públicos,  edificios oficiales, plazas e incluso poblaciones enteras como ocurre en Boyacá,  Colombia. 

Ínsulas es en parte una abstracción de la elaborada construcción del pesebre, al  tiempo que como conjunto recuerda su espíritu anacrónico y absurdo.

ÍNSULAS Y LA TALLA EN PIEDRA DE SAN AGUSTÍN

Desde el año 1995 vengo utilizando la técnica de la talla en piedra como parte de  algunas de mis obras, por medio del trabajo de una comunidad de artesanos talladores que viven en zona rural del municipio de San José de Isnos en el  departamento del Huila, ubicado al sur de Colombia. 

Chiva en camino de San Agustín
Calle de la Locería. San Agustín. Huila

Esta región es el lugar en donde se ubica el más importante centro arqueológico de  Colombia conformado por un conjunto de obras arquitectónicas y escultóricas de  carácter funerario, conocido como la “Cultura San Agustiniana”. 

Esta cultura tuvo su florecimiento entre los años 3300 A.c. y 800 D.c. migrando  posteriormente a Centro América en donde se cree que se fusionó o fue el origen  de varias culturas mesoamericanas. 

La cultura San agustiniana cuyas misteriosas y feroces representaciones de  carácter ritual se expreso por medio del oro, la cerámica y fundamentalmente por  medio de la talla en piedra volcánica En este lugar y con los talladores de piedra se ejecutó la serie

“El gran sueño  americano” que confronta las técnicas e imágenes del pasado precolombino y los  íconos de los medios de comunicación contemporáneos. 

Allí mismo realizo actualmente las tallas en piedra del proyecto “Ínsulas” . La singularidad del proyecto está mediada por este minucioso proceso de  producción que parte de los souvenirs para turistas o de modelos tridimensionales  en materiales como arcilla, cartón, cera o yeso.  

Finalmente, las tallas en piedra de los monumentos están a disposición para  formar parte de un juego más complejo, de una puesta en escena que les saca del  carácter de esculturas para convertirlas en una serie de instalaciones o  intervenciones de espacio que van mutando con el correr del tiempo sin terminar  por afincarse en un estadío definitivo.

Castillo de Colchester
Castillo de Colchester. Talla en piedra de San Agustín. 2009.

INSULAS Y EL JARDIN

Desde años atrás y como parte de una afición personal, el mundo de las plantas  forma parte de mi cotidianidad y de mi entorno vital. Sembrar, cultivar, cuidar y cosechar especies vegetales es una vocación que exige  dedicación, paciencia y una dosis poderosa de humildad. En la vocación del jardinero hay algo admirable, un silencio y un tiempo de  postergación, de expectación e incertidumbre. 

No se juega solo con la habilidad o el conocimiento sino con la suerte y las  contingencias de la naturaleza que implacablemente puede terminar por destrozar  el trabajo de meses de esmero.

La jardinería que ha formado parte desde siempre de la historia de las culturas ha  sido considerada como un arte menor, un arte “galante” e incluso decadente en  cierto sentido, pero un arte ineludible que acompaña el desarrollo de la arquitectura y las artes plásticas, convirtiéndose en muchos casos en singular  protagonista. 

Como recreación en minúsculo de un universo “real” el jardín es artificio y  simulacro es intento de asir y construir un microcosmos particular. el entorno vital del palacio o la casita campesina

Ínsulas

Como objeto paradójico el proyecto Ínsulas aúna el concepto de aislamiento con el de proximidad virtual. Ínsulas es un proyecto eminentemente procesual que muta y se transforma mientras crece. Como dispositivo de apropiación de espacio tendrá una serie de variantes estructurales y temáticas según el espacio a intervenir y el momento de producción. Como objeto estético Ínsulas es una instalación conformada por diversas piezas escultóricas ejecutadas en materiales como la piedra y el bronce y una secuencia de impresiones digitales que parten del registro de las fases de producción y su manipulación visuales. Ínsulas es la conjunción de singulares y disímiles elementos arquitectónicos provenientes de diversas culturas y tiempos. Un encuentro imposible de representaciones icónicas en una serie de abigarrados conjuntos. Recurriendo al imaginario colectivo que ha convertido a la arquitectura universal en objeto de culto pop, Ínsulas es la conjunción ad absurdum de representaciones tridimensionales de edificios y monumentos de relevancia histórica. En una conjunción surreal de tiempos y lugares Ínsulas pone de presente la hibridación de elementos culturales propia de la era mediática.

Detalle de la instalación Ínsulas para la UECCLA
Ínsula. Detalle del montaje en la Galería 9-80 de Bogotá . 2010
Ínsula. Vista general. del montaje en la Galería 9-80 de Bogotá . 2010
Ínsulas. Montaje para la exposición El Bosque intervenido. La visión del Bosque:
Jardín Botánico de Bogotá. 2014. Curaduría Ana María Lozano.